Compartimos la siguiente reseña sobre este libro álbum publicado por el sello Polifonía Editora que nos presenta la historia de una niña fuera de serie.
Por Jaime Cabrera Junco*
Debo hacer una confesión. Es a partir de mi experiencia de trabajo en la Casa de la Literatura que empecé a prestar atención a la literatura infantil, especialmente a los libros álbum. Este tipo de publicaciones no solo nos ofrece una historia en palabras, sino que encontramos un conjunto de imágenes con una potente carga narrativa. Esto amplía la visión que se tiene sobre la lectura puesto que los textos y las imágenes tienen una relación de interdependencia, siendo estas las que se despliegan en gran parte del soporte en papel.
Si bien se cree que el libro álbum está dirigido principalmente a niños, este puede ser leído por adultos, ya que algunos de ellos abordan temas complejos como la muerte, la guerra, la sexualidad, entre otros. La lectura de estos libros requiere una mirada entrenada para observar los detalles que se presentan en las imágenes.
En el Perú, Polifonía Editora es uno de los sellos que trabaja el libro álbum, y entre sus últimas publicaciones encontramos a La pequeña niña, con textos de Luigi Valdizán e ilustraciones de Beatriz Chung.
ROMPIENDO ESTEREOTIPOS
Esta publicación, que la Organización Internacional para el Libro Juvenil (IBBY) ha integrado a su lista de honor de 2018, nos presenta la historia de una niña que, en contraposición a los estereotipos, muestra mucha seguridad, juega con robots, no le tiene miedo a las arañas y se le ve contenta y siempre en actividad. Las ilustraciones a doble página de Beatriz Chung —en acuarelas y lápiz—nos presentan al personaje, sea contemplando el paisaje, jugando, caminando, haciendo equilibrismo, y acompañada por un ratón que hace de cómplice en las distintas situaciones. El texto empieza con “La pequeña niña no le teme a nada/ni a la lluvia ni al desierto” y luego sigue una enumeración de situaciones que nos van mostrando el carácter decidido de este personaje.
Si bien el mundo que vemos a través de las imágenes nos remiten a la niñez encontramos también un diálogo con el futuro: “no le aterra resfriarse ni tampoco envejecer”. En suma, en esta serie de acciones vemos a la niña siempre decidida en lo que hace, sin medir incluso el peligro. El texto se presta para la lectura en voz alta, a través del ritmo y sonoridad. Además, por su brevedad estamos casi ante un poema.
LEYENDO IMÁGENES
En las ilustraciones de este libro hay algunos detalles que complementan la historia, algo que mediante la imaginación de un niño puede enriquecerse aún más. Esta es una lectura mucho más activa de lo que se cree. A pesar de que el texto es sencillo la historia no es monótona sino que, a través del elemento gráfico, el relato se va enriqueciendo. He aquí la esencia del libro álbum.
¿Por qué selecciono un libro como este? Además del trabajo de edición impecable, la historia nos muestra lo importante que es la autenticidad y la libertad, sin temor al error ni al fracaso. El que la protagonista sea una niña enfatiza que el espíritu decidido y libre no es solo cuestión de hombres.
Sobre los autores sabemos que Luigi Valdizán —comunicador audiovisual y músico—, ha publicado anteriormente Las interminables preguntas de Juanito y su bicicleta amarilla; en tanto Beatriz Chung —artista plástica e ilustradora—ha participado en libros como El origen de los hombres y otros cuentos del antiguo Perú de María Rostworowski, y Chepibola de José Miguel Cabrera.
La pequeña niña puede despertarnos la curiosidad para explorar el libro álbum, el cual nos presenta diversas opciones de lectura contrariamente a lo que se entiende por literatura infantil, donde se antepone el mensaje o moraleja a la historia e ilustraciones. Estamos frente a un proyecto artístico-literario que puede ser compartido por niños y adultos.
*Reseña publicada originalmente en Perú21, en la columna «Leo por gusto».
