Bogotá 39: nuevo catálogo de la literatura latinoamericana

 

No es bueno guiarse de las listas, ni de los premios ni de la presencia mediática. El mejor escritor no siempre es el que está en todos lados y nos habla desde todos los frentes. El mejor escritor es el que tiene algo único y diferente que decirnos. Las listas son referencias, útiles a veces, o en otros casos son elementos de mercadotecnia que ayudan a vender libros. Lo cual no está mal, ojo.

Con esto dicho, hace unos días se conoció la lista de escritores latinoamericanos menores de 40 años seleccionados por el Hay Festival y que lleva el nombre de Bogotá 39. Son 39 escritores a los que les han puesto los reflectores sobre aquello que se supone es la nueva narrativa latinoamericana. Es, en todo caso, un catálogo de nuevos autores de nuestra región.

En la nómina hay nombres indiscutibles, como el de Samanta Schweblin (Argentina), Valeria Luiselli (México), Carlos Fonseca (Costa Rica), Diego Zúñiga (Chile), entre otros autores de reciente aparición como Liliana Colanzi (Bolivia), Giuseppe Caputo (Colombia), por citar solo algunos. En el caso peruano nadie ha cuestionado las inclusiones de Juan Manuel Robles, María José Caro y Claudia Ulloa Donoso, todos ellos autores con obras publicadas recientemente, excepto Ulloa, quien en 2013 presentó la reedición de su primer libro de cuentos El pez que aprendió a caminar (2006).

Siempre se dirá que pudo haber uno u otros nombres más, pero estos tres autores peruanos -y ese es el significado de esta lista del Hay Festival- son los que tienen proyección de convertirse en voces sólidas. En el caso de Robles con Nuevos juguetes de la Guerra Fría, una voz en franco proceso de hacerlo y que ya anunció un libro de cuentos próximo a publicarse. María José Caro con La primaria demostró que tenía algo personal que decir, y que en su novela Perro de ojos negros, con altas y bajas, ha continuado desarrollando su propia voz. Y de Claudia Ulloa, esperamos una nueva obra para ver si continúa explorando a través de sus historias la creación de atmósferas y de estados de ánimo. El que no publique no quiere decir que haya dejado de escribir.

Un aspecto positivo de esta nómina es poner en el radar latinoamericano a autores de países como Ecuador, Cuba, Puerto Rico, Guatemala, Venezuela, que difícilmente circulan con tanta fluidez ni siquiera a través de las editoriales independientes. En ese sentido, han anunciado la publicación de una antología con textos de estas 39 voces. Habrá que leerlos y buscar qué tienen que decirnos, especialmente los autores a los que todavía no podemos encontrar.

El tiempo es el mejor antologador y en diez años más sabremos en qué andarán estos 39 escritores luego de este espaldarazo.

 

Para ver la lista completa de autores seleccionados, recomendamos ingresar a esta nota preparada por la web BBC Mundo