Una conversación con Antonio Vera, escritor y editor peruano que ha lanzado en Bolivia un sello que combina el trabajo literario con el visual.
Entrevista y fotos: Luis Rodríguez Pastor
La reciente publicación de Rizoma (2015), de Carlos Yushimito, la anterior publicación de Tampoco es Sudoku (2014), de Antonio Vera, y la reedición de Flores (2014), de Mario Bellatin, ha generado interés por conocer un poco más sobre La Perra Gráfica, editorial que combina el trabajo literario con el visual en finas y artesanales ediciones. Antonio Vera (Lima, 1973), escritor y editor peruano que vive hace más de veinte años en Bolivia, nos cuenta un poco más sobre esta propuesta, nacida en La Paz, pero nutrida en buena cuenta desde Lima.
¿Cómo nace La Perra Gráfica? ¿Cuánto tiempo tiene?
El proyecto Perra Gráfica Taller, más conocido como La Perra Gráfica, nace en 2013 como un espacio que articula a artistas gráficos en torno a la producción y difusión de obra gráfica. Lo primero que se hizo —que cuenta con un espacio de taller y otro de exposición— fueron talleres de formación y algunas exposiciones. Desde 2014, el proyecto abrió su línea editorial.
¿Cuál es el origen del nombre?
El nombre busca reivindicar el origen callejero y, en gran medida, subalterno del arte gráfico respecto a las denominadas bellas artes. Algo de ferocidad, de provocación (la diferencia entre perro y perra), viene asociado al nombrecito también…
¿Quiénes conforman el equipo?
El proyecto es una idea original de Daniela Rico, grabadora e ilustradora de La Paz (Bolivia). Marco Tóxico, conocido historietista y diseñador paceño; Fabiola Varnoux, joven diseñadora; Pamela Mercado, grabadora chuquisaqueña; y Antonio Vera, editor y profesor de literatura, integran el núcleo duro del proyecto al que ocasionalmente se articulan otros creadores.
¿Qué libros han publicado hasta el momento?
Hemos publicado la novela corta Tampoco es sudoku (2014), de Antonio Vera (ilustrada por Frank Arbelo); la antología de cómic Estéril (2014), de Marco Tóxico; una reedición de Flores (2014) de Mario Bellatin (ilustrada por Paola Guardia), y Rizoma (2015), una colección de tres relatos de Carlos Yushimito (ilustrado por Daniela Rico).
¿En qué países se distribuyen sus libros? ¿Están en librerías?
Se trata de ediciones pequeñas, de 300 a 350 ejemplares numerados, por lo que solo algunos ejemplares llegan a librerías. En La Paz preferimos vender los libros directamente en nuestro taller. Algunos ejemplares de nuestros libros se encuentran en la librería SUR, de Lima; Eterna Cadencia, de Buenos Aires; Metales Pesados, de Santiago; Fondo de Cultura Económica, de Bogotá; Hypatia, de México; Malisia, de La Plata; e Iberoamericana, de Madrid.
¿Cuál es el perfil de los libros que publican? ¿Cómo los producen? ¿Tienen algún auspicio?
Hay que diferenciar los dos primeros títulos, que son autoediciones, de los dos últimos, que son la edición de dos grandes autores latinoamericanos de enorme vigencia y trascendencia. Pero más allá de esos epítetos grandilocuentes, me animo a vincular a Flores y Rizoma a partir de la radicalidad de su apuesta de escritura. En ambos casos, el lector es convocado al juego ficcional entendido como un espacio no necesariamente confortable o pasajero, sino como una experiencia profundamente cuestionadora, en la que los sentidos convencionales son puestos en cuestión, ya sea desde la propuesta formal o desde la temática abordada.
¿Qué libros están en camino?
Aquí me disculpo por no responder más que señalando que hay cinco títulos en camino para el 2016… como están todavía en la etapa previa, prefiero no anunciarlos todavía.
¿Dónde se pueden conseguir los libros de La Perra Gráfica?
En la página del Facebook del proyecto y en las librerías mencionadas.
