María José Caro: «Lo que uno es de adulto está marcado por las experiencias de la niñez»

La niñez como radiación que marca nuestra vida de adultos. De esta premisa parte María José Caro en La Primaria (Alfaguara, 2012) su primer libro de cuentos, cuya protagonista es una mujer que evoca las situaciones más importantes de su niñez.


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Por Jaime Cabrera Junco


Miremos un momento hacia atrás. En la primaria aprendimos a leer, a escribir y a realizar las operaciones matemáticas más elementales. Pero también en esa etapa comenzamos a tener noción de que el mundo es mucho más ancho (y ajeno) que el comprendido por las paredes de nuestra casa. En suma, iniciamos ese largo y complejo proceso de adaptación a nuestro entorno. Eso le ocurre a la pequeña Macarena, una niña de seis años, quien en primer lugar debe afrontar la separación de sus padres y posteriormente otras situaciones como la muerte de su abuelo, algunos sucesos bochornosos en la escuela y también el primer enamoramiento. De esto precisamente trata La Primaria (Alfaguara, 2012), el libro de cuentos de María José Caro León-Velarde (Lima, 1985), quien inicia así su camino en el campo literario.

(Un agradecimiento especial a la librería Communitas por habernos permitido realizar la entrevista en uno de sus ambientes)


¿Siempre quisiste ser escritora o este fue un inesperado descubrimiento?
No, esto ha sido totalmente inesperado. A diferencia de muchos escritores que escriben desde adolescentes en mi caso comencé a escribir desde los 18 o 19 años que fue cuando empecé a leer mucho. Entonces de tanto leer apareció el ‘bichito’ de la escritura porque, además, leía frases geniales y me decía «en algún momento también quiero hacer eso, transmitir algo así». 


¿Y cómo surgió tu interés por la lectura?
Mi primer acercamiento a la lectura en profundo, no me refiero a la época del colegio, comenzó a través del cine. Veía películas que me encantaban y en muchos casos encontraba que estaban basadas en libros. Por ejemplo, El club de la lucha, de Chuck Palahniuk, Pregúntale al polvo, de John Fante. Fue así que empecé a leer todos los libros de Fante y buscaba las referencias que él mencionaba en sus obras, y así me fui orientando hacia otros autores. 


De estas lecturas y autores, ¿cuáles fueron las que te despertaron el interés por escribir?
John Fante en primer lugar, porque de temas simples construía una prosa genial. Luego Bret Easton Ellis con Psicópata Americano y toda la seguidilla de libros. De autores latinoamericanos me gusta mucho Edmundo Paz Soldán, para mí es un referente clarísimo, y también Rodrigo Fresán.


¿Y en qué momento entonces te decides a escribir?
Fue motivada por las lecturas porque de pronto iba caminando y  se me venían a la cabeza frases que había leído. Además, partiendo de la base que las palabras son las cosas más cotidianas y la manera más ordinaria que utilizamos para comunicarnos. Pero al ordenar las palabras de forma precisa y original puede resultar algo genial. Cuando leo algo que me gusta mucho siento que se me pone la mente en blanco un segundo y siento que han dicho algo que yo hubiera querido decir y no sabía cómo decirlo. Entonces, me digo que quiero tratar de hacer eso.


¿Y ese primer intento fue directamente a través de un cuento?
Sí. Al principio me puse a escribir cuentos sobre distintos temas, pero empecé a tener el hábito cuando escribí el primer cuento de La Primaria, titulado A mitad de la noche, y sentía que ese personaje no había sido agotado y que había más historias y me encaminé hacia el cuento sobre la niñez.




LA PRIMARIA: EL APRENDIZAJE

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María José Caro estudió Ciencias de la Comunicación en la Universidad de Lima y, hace unos meses regresó al Perú luego de terminar un máster en la Universidad Complutense de Madrid. Antes de comenzar esta entrevista conversamos sobre libros y sus autores favoritos. Ella habla apasionadamente sobre todo de David Foster Wallace, John Fante y Edmundo Paz Soldán.  Del autor boliviano habla con particular énfasis de sus cuentos de Amores imperfectos y de novelas como Los vivos y los muertos y La materia del deseo. De Foster Wallace, este innovador y suicida autor, cuenta que tal fue su interés de saberlo todo de él que encontró su certificado de necropsia por Internet. Y así, de a pocos, nos centramos a hablar sobre La Primaria, su libro de cuentos.


Este primer cuento que da inicio a tu libro fue incluido en una antología que hizo Jorge Eslava en 2009 en el que figuraban cuentos de Mario Vargas Llosa, Alonso Cueto, Carlos Eduardo Zavaleta, entre otros. ¿Cómo surgió este primer relato?
Justo en esa época que leía a John Fante, de quien me gusta cómo narra situaciones sobre la familia y hechos muy cotidianos, entonces dije me gustaría partir de la familia, de la primera experiencia de una niña, que es, en este caso, la separación de sus padres.


¿Y en qué momento te decides a trabajar en un libro de cuentos?
Porque me dije que esta niñ
a tiene mucho más que decir. Basándome en la premisa de que quería escribir sobre situaciones primeras, puse a la protagonista en ese tipo de circunstancias. Por eso también que el libro de se llama La Primaria.


La narración está presentada como reminiscencias que realiza una narradora adulta sobre su niñez. 
Sí, y es en el enfrentamiento a la muerte, a la vergüenza, el primer amor. Además, como dice Rodrigo Fresán, la infancia es radiación pura que se niega a desaparecer, entonces al final lo que uno es de adulto está marcado por esas experiencias que uno tiene de niño.


Y una virtud de libro es que aunque está dirigido para niños de 12 años puede ser leído perfectamente por cualquier público…
Me parece que los jóvenes están en una situación en que pueden evocar a la niñez de esa forma y yo quería transmitir este tipo de mensajes sin ser tan específica como suele pasar en libros de literatura juvenil, que son como una suerte de moraleja explícita, yo no quería hacerlo así. Entonces jugué mucho con eso y busqué utilizar un lenguaje sencillo.


Y en la publicación de este libro, supongo que el papel de Jorge Eslava fue importante
Sí. Jorge es alguien a quien admiro mucho, no solo como persona sino también como maestro y educador, entonces siempre me sentí impulsada por él para sacar adelante este proyecto. 


¿Y actualmente vienes trabajando en otro libro?
Sí, estoy trabajando en una novela, no tan juvenil sino pensando en un público adulto.


¿Y cómo es tu relación con la escritura? ¿Es catártica, te permite explicarte cómo es el mundo…?
Creo que me permite explicarme cómo es el mundo y es algo de lo que ya no puedo prescindir. Creo que cuando uno se mete en el camino de los libros es difícil alejarse porque se vuelve una necesidad que también es catártica.


¿Y cuál es tu aspiración como escritora?
Sacar más libros adelante y seguir escribiendo.





CINCO LIBROS RECOMENDADOS POR MARÍA JOSÉ CARO


1. La broma infinita, de David Foster Wallace.

2. Un año pésimo, de John Fante.

3. La materia del deseo, de Edmundo Paz Soldán.

4. Jardines de Kensington, de Rodrigo Fresán.

5. Hospital de ranas, de Lorrie Moore.






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