Con sendos discursos -como manda el protocolo- se inauguró la 17 edición de la Feria Internacional del Libro de Lima. En la ceremonia participaron los escritores de la delegación de Argentina, país invitado de honor. La feria va hasta el 1 de agosto. Vaya, vea y compre.
«Estamos aquí por algo que nos importa mucho y que no importa a tantos: la literatura». Así resumió el escritor argentino Martín Kohan lo vital que son para los amantes de la palabra escrita todas las ferias del libro. Es decir, ser un centro de reunión para hablar de libros, para conocer las nuevas publicaciones y para participar en diversas actividades. La Feria del Libro de Lima, cuya edición 17 se acaba de inaugurar, será durante 14 días el escenario especial para hablar, para ver, tocar y comprar libros.
El primero en hablar fue el presidente de la Cámara Peruana del Libro (CPL), Jaime Carbajal, quien repetía constantemente «cómo no sentirme orgulloso» acompañado de sus razones: por una feria más grande, con más actividades, con más presentaciones de libros y por tener a Argentina como invitado de honor. En la mesa, además de los representantes de la diplomacia argentina, estaba el homenajeado de este año: Edgardo Rivera Martínez.
La directora general de asuntos culturales de la Cancillería argentina, Magdalena Faillac, reivindicó la pertenencia de su país a Latinoamérica por su pasado incaico en el norte, cuya herencia quechua y aymara aún se mantiene. «Quiero mencionar a un escritor peruano que cuando era una jovencita me hizo abrir la mente: José María Arguedas«, dijo al remitirnos al norte argentino. Asimismo, resaltó la universalidad de César Vallejo y otros autores como Ciro Alegría.
Quien hizo una suerte de mea culpa fue el representante del Ministerio de Cultura -el ministro Luis Peirano no pudo asistir-, pues afirmó que «somos el país donde menos se lee» y cuya Ley del Libro no ha conseguido volver al libro un objeto asequible como, por ejemplo, Argentina que casualmente es nuestro invitado de honor.
La Feria del Libro de Lima abre sus puertas nuevamente y hasta el 1 de agosto, y ofrece, además de conversatorios y presentaciones de libros, ciclo de películas argentinas, espectáculos musicales y show de cuentacuentos para los más pequeños.
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